En cualquier empresa de excavaciones de tierra en Jaén podemos encontrar una excavadora. Pero estos vehículos arrastran detrás una interesante historia que muchos no conocen.

En el siglo XVI Leonardo Da Vinci, en su faceta de inventor, diseña los primeros trazos de lo que podía ser una excavadora de tipo mecánico. Solo eran dibujos, ya que los materiales que se necesitaban para su construcción no eran tan accesibles como en la actualidad.

Ya en el siglo XVIII, con la creación de las máquinas de vapor, muchos se lanzan a la fabricación de diversos aparatos de tipo mecánico. Fue así como William Otis concibe, en 1835, la primera excavadora mecánica. Cuatro años después registraría su patente. Mientras tanto, en España, todavía quedaba lejos el intento de acometer la construcción de una obra civil y las labores de excavaciones de tierra en Jaén.

Debido a que en aquellos años la mano de obra era todavía relativamente barata, las excavadoras tardarían aproximadamente 50 años en desarrollarse. Fue en la construcción del canal de Panamá donde los fabricantes de excavadoras utilizaron los terrenos como campo de pruebas. A partir de este momento, explotaría la comercialización de las mismas.

Cada vez se empiezan a construir más grandes, sobre todo para la industria minera. Llegamos así a 1965, cuando se fabrica la pala excavadora más grande que jamás se haya visto, apodada El Capitán. Capaz de levantar 270 toneladas de tierra con su enorme pala.

En la actualidad, con la llegada de las nuevas tecnologías, estos aparatos han mejorado y se han desarrollado de manera ostensible hasta lo que conocemos a día de hoy.

En cualquier caso, en Antonio Jiménez González conocemos muy bien las excavadoras, puesto que gozamos de una amplia experiencia trabajando con ellas. Contáctanos y un magnífico equipo de profesionales te atenderá para ofrecerte una solución que se ajuste a tus necesidades.